DEVOCIÓN A GREGORIO DE LA
RIVERA
ESCRIBE EGLY COLINA MARÍN
Nacido en el estado Mérida, República Bolivariana de Venezuela, se
desconoce la fecha exacta de nacimiento y muerte.
Se ha creado una devoción particular a esta ánima desde los tiempos de la
colonia, especialmente para recuperar las cosas perdidas: sean objetos,
personas o la fe perdida.
Cuentan las voces del pueblo (voz de Dios) que Gregorio de la Rivera hubo
sido un hombre ateo, de mal carácter, obstinado, y además celoso, cosas que
hacían sufrir a su esposa, quien era creyente, asistía al Santo Sacrificio de
la Misa aunque a escondidas, por temor a las represalias de su marido, quien
sospechaba de ella, pues la vigilaba, en la creencia de una infidelidad
conyugal.
Esto, no fue motivo para que su esposa dejara de ir a la Iglesia, ya que
mantenía una comunicación con DIOS, pidiéndole su conversión. Sin embargo, el
marido iracundo ante su desobediencia, arremetió contra ella y la mató. Estando
en cautiverio, conoció la verdad y arrepentido se convirtió a la fe cristiana y
la Virgen a quien él suplicó perdón, le concedió la gracia de que: todas las cosas perdidas aparecerían a ser
invocado su nombre, objetos, personas,animales etc...
Siendo parte de una leyenda del pueblo, son muchas las personas que profesan
una devoción particular a Gregorio de la Rivera. La voz del pueblo es la voz de Dios. Juzgue Usted.
ORACIÓN: santificado José Gregorio de la Rivera. Tu que fuiste predestinado por el mártir del cerro del Gólgota y luego confirmado por el Vaticano para que fueras el guardián de la hacienda de tu devoto, el custodio de su dinero, de sus joyas y piedras de la buena suerte y el don de hacer aparecer los objetos perdidos, que nos haces pagar la moneda que nos adeudan. Conociendo de estas virtudes de que has sido investido, acudo a ti para pedir este favor:--------Te imploro me concedas este favor para gloria y honra tuya. Amén
ORACIÓN: santificado José Gregorio de la Rivera. Tu que fuiste predestinado por el mártir del cerro del Gólgota y luego confirmado por el Vaticano para que fueras el guardián de la hacienda de tu devoto, el custodio de su dinero, de sus joyas y piedras de la buena suerte y el don de hacer aparecer los objetos perdidos, que nos haces pagar la moneda que nos adeudan. Conociendo de estas virtudes de que has sido investido, acudo a ti para pedir este favor:--------Te imploro me concedas este favor para gloria y honra tuya. Amén
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